Hay un lugar

El otro día fui al querido Instituto Rosario de Santa Fe, por el cumple de mi hermanita. Mientras esperaba que termine el recreo, me quedé viendo a todos los nenes y nenes vestidos de rojo y azul correr, jugar, saltar, reír. Y me costó mucho no llorar. Mucho.

Porque en ese mismo patio pasé 6 años de mi vida. El Rosario es lo mejor, es como una familia, un lugar donde no solo aprendés todo lo que se aprende en la escuela, sino muchas cosas más. Es un lugar lleno de personas buenísimas que siempre están dispuestas a darte una mano si lo necesitás. Que aunque hace años que no pases por ahí, se van a acordar de quién sos.

Es un lugar que extraño, al igual que todos los que pasamos por ahí. Un lugar lleno de recuerdos. Un lugar donde conocí a varias de mis mejores amigas. Un lugar donde crecí.

Y me pone muy triste saber que este año es el último. Este año cierra. Y después, nada. Nadie más va a crecer ahí porque el IRSF está en quiebra :(